Música para volar

27/11/09


La negación inducida como aguja que atraviesa mis pieles, no es más que un capricho, un salvajismo innecesario. Yo digo NO cuando es necesario. Cuando el SI no es capaz de filtrarse entre los vocablos de los cuales siempre hablo, esos que se empujan en la comisura de mis labios, ansiosos por arrojarse al precipicio y volar, escaparse. Es que ya no quiero decir NO. No quiero merodear el lado abstracto de nuevo. Esta vez quiero decir SI, y para siempre. Como algo infinito, como una indeterminación, un signo figurativo que alude a lo mas intangible. Pero siempre son las mismas las palabras que vomita mi garganta. Y siempre son las mismas palabras que se anudan y pretenden un pedacito de existencia. Y aunque yo quiera parar de decir NO, iría contra la corriente, me arrastraría, mejor dicho. Y aunque quisiera decir siempre SI, también sería imposible porque las palabras no se elijen. Las palabras llegan. Llegan y se van, para que luego vengan unas nuevas, también al azar.
Quién necesita hablar?

19/11/09

Implosión.


Si el espasmo
desgarra,
oprime,
desgarra,
no es azul tu cielo.
Es tornasolado
es transparente
es multicolor
pero no es azul.
Yo queria un cielo azul
que se fundiera en el horizonte con el mar.
Pero el espasmo
y luego la asfixia
y luego la náusea
y la desintegración.
La desintegración.
Algo en lo hondo quizo estallar.

17/11/09

Inestabilidad.


No quería bifurcarme en lo vasto, en lo complejo, en lo inestable. Quería la inmensidad. Lo quería todo. Y a vez despreciaba lo inabarcable.
Es que la sombra que se refleja al espejo me dijo que todo es envase, que todo es descartable, que lo escencial se evapora de un momento a otro. Tiene razón.
Por eso rompí el espejo. Entonces me bifurqué. Y se desató la tempestad.

Sigo anhelando la inmensidad.

(Y estas palabras ilógicas se siguen anudando unas con otras epujándose para salir).

16/11/09

Lógica del tiempo y del espacio intangibles.




El tiempo como mancha en la pared desgastada. El tiempo como el más fino cristal. El tiempo como vacío inalcanzable que naufraga en medio de la náusea. No quiero ser tiempo. Pero el tiempo todo lo abarca, todo lo consume, todo lo desintegra, detenidamente y con una precisión que sólo él es capaz de ejercer, es el tiempo.
Y no es que odie cómo se ve en la estantería, reposando inerte. Lo que odio es poder verlo pero nunca, nunca jamás lograr alcanzarlo. Es algo intangible que corrompe mi existencia y la transforma en algo, en algo que circula en espiral, hacia el encuentro de nada, hacia el encuentro de sí mismo, es decir de todo.
Y esta desintegración, no es cuestión de delirio. Es cuestión de lógica. Es el tiempo retorcido y plegado una y mil veces mas.
Este vomitar de movimientos y palabras y abandonos falaces, es cuestión de un tiempo que jamás cesa, que jamás estará dispuesto a dejar de circundar en lo hondo, en lo inhabitable, así como en lo intocable, en el todo al que aludo cuando quiero decir existencia, cuando quiero decir más allá del mas allá.
Es cuestión de lógica. De lograr concebir una realidad plegada y estrujada como ésta, como lo que es: tiempo. Nada más que tiempo.



(Tiempo que se esfumó entre un cielo azul que finge abrazarme y un sol que de tanto hablar en silencio solicitó un hilo de paz).

14/11/09


Los 5 años mas intensos de toda mi vida.
Hoy se me escapan de las manos.

13/11/09

Yo no quería correr.


Tanto tiempo explicándote lo que yo quería decir. Yo no quería correr. Yo quería dejarme llevar.
Creí que no habías entendido. Creí que vos sí querías correr. Y arrastrarme con vos.
Pero no, justo cuando pensé que me tomarías de la mano para correr a la par, a pesar de mi resistencia, dijiste que no importaba. Que no necesitabas correr. Y la verdad es que yo tampoco lo necesito.
Entonces supe, que lo único que importaba era despegarme del recorrido feroz del tiempo, desligarme de los gritos desesperados de los animales salvajes que necesitan hacerse oir, y aferrarme a lo único certero: esta ambición por que mis ojos todo lo abarquen.
Y esta primavera encarnada que deja al descubierto todas las ganas de que el sol brille día y noche.
Yo no quería correr.

10/11/09

Decisión.

Sé.
Por eso ignoro.
Porque palabras tan vacías no rozan el abismo de mi contorno.

2/11/09

Mutilación


Quisiera que este abrir y cerrar de ojos no anulase el ladrido de los perros desconcertados que ya no encuentran un lugar en donde ladrar. Como tus hojas, que ya no encuentran un suelo en donde caer. O tus pies, que ya no encuentran tierra firme en donde apoyarse. Porque el viento sacudió con todo. Incluso con mis lagrimales. Ya no puedo derramar una sola lágrima. Y ganas no me faltan, pero sí lagrimales. Qué tristeza! Toda esa incertidumbre por ahí rondando, mientras yo acá no soy capaz de vomitar mi angustia por las pupilas. Qué injusticia! Tanta inmunidad arrastrandose allá afuera, y yo acá sin poder arrancarme una tras otra todas las pestañas. Tampoco tengo uñas. Me las arrancaron en una ceremonia poco sutil y muy salvaje. Pero no sufrí, no vi nada, ya que también me arrancaron los ojos, no sentí nada, porque también me arrancaron el alma. Soy un simple armazón en descomposición, una maqueta desvencijada por el paso del tiempo que ya nadie observa porque nada atractivo conserva. Y es lógico. Uno con los años se desgasta. O lo desgastan... (o lo mutilan, o lo censuran).